viernes, 26 de diciembre de 2008

Aquel tiempo huido: La Izquierda

Entre las producciones audiovisuales de los últimos 9 años, es decir del año 2000 a esta parte se evidencia la fluctuación entre cierta tentación de representar directamente el mundo y no contemplarlo en su sordidez y, cierta tentación moral- adolescente- por tomar una posición respecto al mundo, por supuesto que esta última y sus “relatos comprometidos” se aproximan más al historiscimo que a lo ideológico.

Dia de boda (Rodrigo Ayala, 2008 )



En un cine en que ninguna puesta en escena se salva de secuencias de alcohol y de fiesta emerge un enunciado, que recorre y se intercambia entre algunos personajes de estas obras, desde Berto: lo mas bonito hasta Eleuterio: la bicicleta, pasando por el desdibujado Juan: Margaritas negras o la adolescente Alma: alma y el viaje al mar. Una generación de cineastas que no se reclama heredera de un tiempo pasado ni deudora de proyectos históricos despliega entre el mutismo y la más ampulosa retórica una incuestionable proposición generacional, la negación delirante del pasado, porque ningún tiempo pasado fue mejor.

psicourbano (Daniel Suárez,2006)



El pasado, aquel tiempo huido existe en el fuera de campo -Lo más bonito, Dependencia sexual, El corazón de Jesús, Espíritus independientes, Día de boda, Psicourbano, Margaritas negras, Los andes no creen- a partir del silencio y la ausencia como extensión del campo visual. Pero, este pasado es encuadrado, de forma oral, es decir que asume su presencia al interior de las márgenes en I´am Bolivia, cuando Ernesto impugna a su tío “revolucionario y ahora un vendido” o cuando a Gregorio no le permiten bailar porque “era líder comunista y no cree” en Esito sería…. o cuando Deo conversa con Paradiso En la calle de los poetas y recuerdan al “Molotov que ahora es empleado público”, y se constituye en el leiv motiv de El Clan, un escuadrón que intento expurgar a la sociedad de los “vendidos vendepatrias” y en menor medida lo vemos en Los hijos del último jardín, cuya aproximación ética es más honesta; los referentes se han disuelto a la misma velocidad con se desintegra la identidad de sus personajes.

El pasado y las banderas, las banderas del pasado, el pasado embanderado, ya no son ni podrán ser imágenes-tiempo en este cine, sino un tiempo al cual se le puede homenajear con algo de solemnidad en la imagen (Di buen día a Papá). Una obra que radiografía a una generación “nosotros no somos de izquierda ni de derecha”, la cual es impugnada por sus hijos -huérfanos- Los hijos del último jardín, I´am Bolivia, American visa, La Calle de los poetas, Alma y el viaje al mar, El Clan, La bicicleta de los Huanca, Alas de papel; o prefiere el mutismo radical de la orfandad: Psicourabano, Espiritus, Margaritas negras, Licorcito, Lo mas bonito, Dependencia, Quien mató a la llamita blanca, para plantearnos una postura ética/estética concreta; como no hay referentes-verdad-historia: interpreto, y el consabido ´como no tengo nada que decir, hablo, hablo y hablo´

Di buen dia a Papá (Fernando Vargas, 2005)

La emergencia de estos personajes, extraídos de un momento y un espacio definidos en la historia nacional, no representan una reflexión sobre la frontera de lo real y lo ficcional, como hace Kalashnikova en un interesante giro de guión en I am Bolivia, sino que son personajes instrumentalizados cuyo único fin es el de pasar la factura a una generación frustrada y frustrante.

(la ausencia de pelis en este brevisimo recuento (recuerdo), a modo de pretexto, para hablar de la(s) izquierda(s) es deliberada, obedece a la arbitrariedad del autor).

Lo mas Bonito y mis mejores años (Marin Boulocq, 2006)